La prensa al servicio de los facinerosos es corresponsable de esta crisis
Soy una estafada más al igual que vosotr@s y de las miles que hay en nuestro país por las participaciones preferentes y la
deuda subordinada de “La Caixa, ahora Caixabank. Dicha entidad me engañó falsificándome la firma en el contrato para ocultarme
los riesgos de este producto financiero que venían indicados en el
tríptico. Hay abierto un proceso penal
contra la entidad y hasta el momento, dos personas están imputadas.
Este hecho no ha salido en la prensa convencional por tratarse de una
estafa cometida por un banco con
gran poder factico en Catalunya. Salvo
El País, ni La Vanguardia, ni El Periódico, ni El Punt Avui
publicó la noticia a pesar de
escribir cartas a todos ellos denunciado
el hecho.
Al descubrir Es Hora, propuse a su
director, Valentín Oyarzabal, sacar la noticia y a la semana siguiente se
publicó en una página entera. Me ofreció
además el semanario para difundir el expolio de los bancos con los ahorros de la tercera edad. Desde ese
momento y en nombre de la Plataforma
Estafabanca, he colaborado regularmente para divulgar
que tanto el Gobierno, como la
CNMV, como los bancos, como el FROB, han
llevado al borde del abismo a miles de personas a causa de la mayor estafa de la banca en
la historia de este país.
Foto de Valentín Oyarzabal
Esta información ha ayudado,
junto a las protestas continuas en la calle de los afectados en todo el
país, a dar notoriedad y difusión a una noticia que han ocultado
muchos de los medios, sobre todo
al principio de airearse este descalabro financiero.
Cualquier persona que quiera
divulgar irregularidades o reivindicar
causas sociales, tiene en este semanario la misma oportunidad que yo, porque “el periódico Es Hora es el único informativo
que apoya sin ningún tipo de interés a todos los que luchen por un cambio
integral a favor de la justicia y la solidaridad global”
Los
periódicos “al uso” adolecen de transparencia y complicidad con el pueblo, porque determinados intereses les condicionan a
pactos de silencio para ocultar verdades incómodas que
destaparían las corruptelas de las
instituciones, los políticos y los banqueros. Esta coalición con los medios
aniquila y amordaza la libertad de expresión y los convierte en
coparticipes de las tropelías de los que nos desgobiernan. Al mismo tiempo obligan indirectamente al resto de la prensa, a
actuar de la misma manera para asegurar
su supervivencia y no morir en el intento.
El caso del periodista griego Kostas
Vasevanis, ha dado la vuelta al mundo al ser detenido y enjuiciado por publicar “la lista Lagarde” con datos de 2000 titulares griegos de cuentas bancarias en
Suiza. Esta lista estuvo durante dos
años en manos de las autoridades griegas
que jamás investigaron si podrían tratarse de evasores fiscales. Este hecho
confirma que la libertad de expresión se considera un delito cuando existen
facinerosos dispuestos a presionar mediante subvenciones enmascaradas
como campañas de publicidad, para no poner en juego sus intereses. Vasanis ha sido
declarado inocente tras 11 horas
de juicio gracias a la presión mediática
del The New Yor Times y el resto de prensa Internacional que abrió el foco sobre este asunto.
Un caso significativo, por haberse producido en tiempo de recortes, que
habla por sí mismo y que evidencia los
pactos de silencio con la prensa, es la adjudicación de la Generalitat exclusivamente a los periódicos con sede en Catalunya, de 1,8 millones de euros a fondo perdido para
gastar hasta finales del 2012. Los diarios elegidos han sido, La Vanguardia, El
Periódico, El Punt Avui, y Ara. Es costumbre
que estas subvenciones Artur Más las destinen siempre a los mismos
periódicos que se convierten en muros de contención si el ciudadano denuncia lo que se cuece en las grandes esferas e
instituciones de esta Comunidad.
Esto lo hemos podido comprobar los estafados por las preferentes porque
muchos de estos medios, La Vanguardia, El Periódico, TV3 etc han silenciado
esta descomunal estafa y nunca han hecho acto de presencia en nuestras
manifestaciones para informar que los ahorros de la tercera edad, sirvió como
el primer rescate de los bancos.
Artur Más dormirá
tranquilo hasta finales de año sobre lo que pueda decir
la prensa de él y de su partido.
Posiblemente en el 2013 lanzará otra
remesa importante de fondos con destino
a los mismos periódicos para seguir
conciliando el sueño. Ocultar la codicia y la falta de escrúpulos de los
bancos es lo que le da acceso a conseguir préstamos millonarios, préstamos que la mayoría de las veces no ha
tenido que devolver porque los bancos se los ha condonado a cambio de otros
favores. Es curioso que ningún otro sector privado reciba tan alegremente
ayudas que no se justifican, estoy segura que esto no pasa en ningún otro país
europeo.
Hace unos veinte cuatro años viajaba
bastante al extranjero por motivos de trabajo y a través de la prensa Internacional, me enteré que el Rey era un gran conquistador. La noticia
destapaba sus flirteos e infidelidades con la Reina y el romance que al parecer mantenía en aquel tiempo con la Princesa de Gales,
Ladi Di. El reportaje se ilustraba con fotos
muy comprometidas entre ellos durante un crucero que de haber salido en
periódicos nacionales (algo imposible por la falta de libertad de expresión) habrían puesto al Rey en el punto de mira y
escandalizado a todos los españoles.
Aquella noticia me hizo pensar que para
estar bien informado de lo que ocurría en España, había que leer la prensa extranjera. Posiblemente
los países de la UE tengan que leer la
nuestra para informarse de lo que
pasa en los suyos.
La ocultación fomenta
la corrupción y en esto gran
parte de culpa la tiene la prensa y los medios
que en el entramado de esta
crisis han faltado al derecho
fundamental de una libre información
que ha atrofiado sus deberes éticos y profesionales, han
dejado al ciudadano fuera de juego y han
puesto en riesgo la estabilidad democrática.
A los
lectores les corresponde seleccionar
entre todas y leer
una prensa independiente, sin censura o interferencia que verdaderamente proteja sus derechos y apoyarla
para evitar que languidezca o
desaparezca.
A la vista
de lo que se cuece, entonar un “misere” por la prensa no vendría nada mal para
pedir perdón por sus pecados “ porque si
no estamos atentos los medios nos harán odiar al oprimido y amar al opresor” ( Malcom X )
Luisa
Vicente Santiago